¿Cuál es el tiempo de carga de un coche eléctrico?
distribuidora_simon_vehiculo_electrico

Decir cuál es el tiempo de carga de un coche eléctrico de forma general es algo complicado, ya que depende de varios factores entre los que se encuentran el tipo de carga, la capacidad de la batería o el nivel de carga inicial del coche, por eso dar una respuesta única es casi imposible. Sin embargo, sí que podemos calcular más o menos cuánto tarda en cargarse un vehículo eléctrico conociendo todos los factores que intervienen. En este artículo vamos a dar respuesta a las principales dudas sobre el tiempo de recarga de un vehículo eléctrico.

 

 

 

 



Tiempo promedio según el tipo de carga

 



En la actualidad se distinguen básicamente tres tipos de carga para el vehículo eléctrico: la lenta, la semirrápida y la rápida. La gran diferencia entre cada una de ellas es la potencia utilizada, así como el amperaje y el tipo de instalación eléctrica. Para utilizar las más rápidas también hay que poseer un coche eléctrico que lo soporte, mientras que la lenta es compatible con todos los VE. Vamos a entrar en detalle en cada una de ellas para conocerlas mejor.

 

 



Carga lenta: de 5 a 20 h

 



El tiempo de carga de un coche eléctrico que utiliza un tipo de carga lenta va, por lo general, desde las 5 hasta las 20 horas. Es la carga más básica y la que utilizaríamos cualquiera de nosotros, por ejemplo, si recargamos nuestro vehículo en el hogar. Se consideran puntos de cargas domésticos que proporcionan carga con corriente alterna DzԴǴá con 3,7 o 7,4 kW de potencia máxima, a 230 V y 16 A o 32 A respectivamente.





El coche puede conectarse a un enchufe convencional como los que tenemos en casa o en la oficina, denominado “Schuko”. El cable a utilizar tiene por un lado un enchufe, y por el otro el conector al vehículo eléctrico, existiendo una caja en medio del cable que contiene electrónica de control.

 



Esta manera de recargar el vehículo se denomina “Modo 2”, nunca superará los 16 A de corriente y el tiempo de carga puede variar entre 5 y 20 horas debido a la capacidad de la batería de nuestro coche eléctrico. Es una carga mucho más barata, ya que en términos de potencia es la que cualquier persona puede disponer en su hogar.





Otra forma de carga lenta son los cargadores de pared de tipo doméstico, los cuales pueden cargar a 230 V y hasta 32 A si la instalación lo permite, es decir, a unos 7,4 kW y disminuyendo a la mitad los tiempos de carga respecto al mencionado “Modo 2”. En este caso, puesto que ya se trata de un cargador fijo dedicado que se conecta de forma directa al coche, hablamos del “Modo 3” de carga.



Este tipo de carga lenta permite aumentar la vida útil de las baterías, es cómoda y sencilla. El único inconveniente es que el tiempo de recarga es bastante largo, así que está pensado para ser utilizado sobre todo por la noche o cuando no vayamos a utilizar nuestro coche.

 

 



Carga semirrápida: de 1 a 4,5 h

 



Los puntos de carga semirrápida son aquellos que podemos encontrar generalmente en aparcamientos de centros comerciales, empresas o aquellos que están instalados en la vía pública. El tiempo de carga del coche eléctrico en este tipo de punto de recarga del VE está entre 1,5 y 4,5 horas, según la capacidad de la batería.





Para conseguir esta velocidad de recarga se utiliza corriente trifásica de 400 V, con una intensidad de entre 16 A (4:30 h) y 63 A (1:00 h), así como una potencia de entre 11 y 43 kW.





Es un tipo de solución que cada vez se extiende más tanto en la empresa privada como en sitios públicos, ya que es la solución ideal para ofrecer una recarga rápida y económica a las personas que lo necesitan, y que cada vez son más debido al auge del VE.





Por otro lado, hay que tener en cuenta la corriente de carga máxima que permite el vehículo, así como si admite carga trifásica o únicamente DzԴǴá, puesto que estas características definidas por el fabricante del vehículo pueden limitar la velocidad de carga aunque el cargador conectado sea capaz de ofrecer una potencia elevada.

 

 



Carga rápida: de 5 a 30 minutos

 



Los puntos de carga rápida utilizan corriente continua de hasta 900 V, 400 A de intensidad y una potencia máxima de 350 kW para recargar un vehículo eléctrico entre tan solo 5 y 30 minutos. Están reservados normalmente para gasolineras o electrolineras, ya que necesitan la máxima celeridad para satisfacer el volumen de clientes.

 



Este tipo de carga utiliza un conector específico diferente al utilizado para cargas en corriente alterna, y el coche debe disponer de toma para permitir ser conectado a estos cargadores.





Es sin duda el tipo de carga más veloz, pero también la más cara. Es posible cargar el 80% de la batería en tan solo cinco minutos, y aunque aún está lejos de llegar a los tiempos de repostaje del coche convencional, el objetivo a largo plazo es poder alcanzarlos.

 



Otros factores que afectan al tiempo de carga del coche eléctrico

 



Como hemos ido viendo a lo largo del artículo, además de la potencia, intensidad y voltaje, hay otras cosas que afectan de manera directa al tiempo de carga de un vehículo eléctrico. El más evidente es la capacidad de la batería de éste: cuanto mayor sea y cuanto más autonomía ofrezca, mayor será el tiempo de carga. Es comparable a tener un tanque de gasolina más grande, para llenarlo tendremos la manguera de la gasolinera más rato conectada, ¿Verdad?





Si te has fijado también hemos hablado de corrientes DzԴǴás/trifásicas, así como de corriente alterna y continua. La DzԴǴá es la que solemos tener en el hogar con un voltaje, amperaje y potencia menor, así como una sola fase o “línea de corriente alterna”, lo que conlleva a un tiempo de carga más lento. Sin embargo, la energía trifásica permite potencias mayores gracias a que cuenta con tres fases, es decir, existen tres corrientes distintas que cargan simultáneamente la batería del coche, lo que permite una carga mucho más rápida. No todos los coches eléctricos aceptan este tipo de cargas.





Por último, también hay que tener en cuenta la compatibilidad de los tipos de conectores existentes en el mercado, así como su capacidad para soportar los distintos tipos de carga. Actualmente los más utilizados son:

 

  • Schuko: es el enchufe que todos conocemos y tenemos en casa. Es de corriente alterna y puede soportar hasta 16 Amperios (3,7 kW).

     
  • Tipo 1 (Yazaki): estándar norteamericano que permite, por lo general, hasta 32 A de carga DzԴǴá (7,4 kW).

     
  • Tipo 2 (Mennekes): es el más utilizado en Europa en puntos de carga lenta y semirápida y rápida. Solemos encontrarlo en cargadores monofásicos y trifásicos de hasta 32 A (7,4 kW y 22 kW respectivamente).

     
  • CHADEMO: conexión de corriente continua que se utiliza principalmente en Asia EE.UU. Alcanza hasta 350 A (150 kW).

     
  • CCS: es un conector Mennekes o Yazaki al cual se le ha acoplado un segundo conector para carga en corriente continua, capaz de alcanzar hasta 350 kW. Los coches dotados con este conector permiten cargar en cargadores de carga lenta, semirápida y rápida. Lo encontramos generalmente en Europa.

 



Como has podido ver, el tiempo de carga del coche eléctrico depende de varios factores que permiten cargar nuestro VE en tan solo 5 minutos o hasta en 20 horas. Con el objetivo de adaptarse al entorno de cada instalación, las soluciones de recarga de vehículos eléctricos de Simon ofrecen las diferentes gamas de tipos de carga del vehículo eléctrico.